Es indudable que el avance de la tecnología nos ha beneficiado de múltiples maneras para el desarrollo de nuestras actividades diarias, tanto laborales, productivas como de esparcimiento. El uso de tecnologías electrónicas, cómputo y de comunicaciones nos permite un mejor desempeño y mayor productividad en nuestra actividad laboral; los sistemas electrónicos son cada vez más flexibles pero tan bien más complejos y sofisticados. Y la energía eléctrica se vuelve indispensable para garantizar la operación de esta tecnología, ya sea en corriente alterna o corriente directa.
Hoy en día, las instalaciones eléctricas son más complejas y deben garantizar el suministro eléctrico para que los equipos y sistemas puedan desarrollar adecuadamente sus funciones. La incorporación de energías renovables, principalmente sistemas fotovoltaicos y eólicos, impulsa también una importante reconfiguración de la red eléctrica.
Sin embargo, la red eléctrica no está libre de fallas; dos de las perturbaciones más comunes de la energía eléctrica son las variaciones de voltaje y los transitorios o picos. Sus causas son muy diversas, pero en este artículo hablaremos de sus efectos y de los equipos que nos pueden ayudar para prevenir afectaciones en nuestras instalaciones; los supresores de pico y los reguladores de voltaje.
¿Qué hace un supresor de picos?
Los supresores de picos son equipos diseñados para mitigar las subidas de voltaje de muy corta duración, menores a un ciclo de red, con tiempos del orden de 4 ms o menos, absorbiendo los picos de energía asociados. Los supresores de equipos suelen ir acompañados de otras protecciones como filtros para interferencia electromagnética y ruido eléctrico. Cuando el pico de tensión tiene una duración prolongada, o se repite constantemente, se puede degradar la vida útil del supresor de picos hasta llegar a la condición de daño, quedando fuera de operación. El supresor de picos no es una solución adecuada para regular el voltaje.
¿Y un regulador de voltaje?
Los reguladores de voltaje tienen como objetivo mitigar variaciones de voltaje con tiempos superiores a un ciclo de red (mayores 16.6 ms), procesando y compensando la energía eléctrica de forma tal que a la salida del regulador tengamos una tensión con un voltaje lo más estable posible y sin variaciones, aún cuando existan subidas y bajadas del voltaje en la red eléctrica. De esta forma, el regulador de voltaje garantiza el nivel constante de voltaje que necesitan nuestros equipos eléctricos para su correcto funcionamiento.
¿Entonces cuál es el mejor?
Como podemos apreciar, los supresores de picos y los reguladores de voltaje están orientados a diferentes condiciones de operación en la red eléctrica, protegiendo nuestros equipos de diferente manera.
La tecnología de los reguladores REGA integra en un mismo equipo ambas protecciones: nuestros reguladores de voltaje integran también una protección para picos de voltaje, ofreciendo un sistema de protección adecuado para las necesidades en aplicaciones industriales, comerciales y de uso doméstico. Cubriendo así un muy amplio sector tecnológico: sistemas informáticos, robots industriales, celdas de manufactura, sistemas de entretenimiento, entre otros.
En REGA nos preocupamos por buscar soluciones tecnológicas adecuadas para las necesidades y aplicaciones actuales de la energía eléctrica, mejorando la calidad de suministro eléctrico.
